El Colegio de la Compañía ya es BIC

1/03/2021 El Consello de la Xunta da luz verde al decreto por el que se declara Bien de Interés Cultural (BIC), con la categoría de monumento y nivel de protección integral, el Colegio de Nuestra Señora de la Antigua, un inmueble clave para comprender el desarrollo del Renacimiento en Galicia y la historia de este ayuntamiento.

El Cardenal Rodrigo de Castro impulsó la construcción de Nuestra Señora de la Antigua, en terrenos cedidos por el Ayuntamiento, la finales del siglo XVI. El edificio se construyó con la intención de convertirlo en centro cultural y museo, además de panteón de su fundador. Sus biógrafos lo describen como un humanista exquisito, amante del arte y mecenas de la cultura, y también como un personaje implicado en la vida de la corte de Felipe II. En un momento de su madurez, decidió crear una institución filantrópica en la ciudad de su infancia, Monforte, y donarle su colección de obras de arte y biblioteca. En 1586 comenzó las conversaciones para la creación del colegio con los jesuítas, con que mantenía muy buena relación y cinco años después encargó la compra de los terrenos y al año siguiente las obras salieron a subasta. Las obras del colegio comenzaron en 1593 con el proyecto que redactaron Andrés Ruíz, un jesuíta de la escuela de Valladolid, y Vermondo Resta, el arquitecto del cardenal en Sevilla.

El inmueble estuvo a lo largo de su historia relacionado con la función educativa, si bien pasó por épocas de mayor o menor esplendor. Incluso por etapas de decadencia relacionadas con las consecuencia del terremoto de Lisboa (1755), con la expulsión de los jesuítas (1767), los saqueos de las tropas francesas (1809) o un incendio en 1824. Ya en manos de los padres escolapios, que se hacen cargo del colegio en el año 1873, el edificio pudo finalizarse en el primer cuarto del siglo XX gracias al reconocimiento del valor y posterior venta de uno de los cuadros que constituyen la singular colección pictórica y de obras de arte del Colegio. El cuadro, obra del pintor flamenco Hugo van der Goes, se vendió al gobierno alemán por una importante suma económica que permitió finalizar las obras entre 1919 y 1930 con el apoyo y supervisión de la Casa de Alba. El edificio también es conocido como el Escorial gallego” por las similitudes arquitectónicas de los dos edificios.

El edificio es de estilo herreriano, con una fachada de 110 metros de largo y una altura máxima de 23 metros. La última planta tiene una hermosa balaustrada de balcones con arcos de medio punto y cada lado de la fachada cuenta con sus torres cuadradas.

La iglesia cuenta con una cúpula de 10 metros de diámetro sostenida por cuatro arcos. El retablo mayor del templo es obra de Francisco Moure, siendo encargado en 1.625, está dedicado en su mayor parte a la Virgen María. Cuenta con unas dimensiones de casi 20 metros por 10 metros.

 

Retablo Iglesi Escolapios

 

A la izquierda del altar se encuentra la estatua orante en bronce del Cardenal Rodrigo de Castro, realizada por Juan de Bolonia, bajo ella está la tumba con el cuerpo momificado del Cardenal.

La Capilla del Santo Cristo cuenta con un Cristo crucificado, en mármol de una sola pieza, obra de Valerio Cioli. La Capilla de las Reliquias, de estilo barroco, contaba con numerosas piezas traídas por al Cardenal de sus viajes a Roma. La mayoría fueron robadas durante las invasiones napoleónicas del año 1809pero aún se conservan una espina de la corona de Cristo y el Lignum Crucis del Cardenal, con dos fragmentos de la cruz de Jesús.

Puntos de interés del edificio son también el claustro con los escudos del Cardenal, la Casa de Lemos, la Casa de Alba y las Escuelas Pías; la escalera monumental de 3 tramos sin aparente punto de apoyo para el central y el museo pinacoteca, con obras del El Greco y Andrea del Sarto, además de un retrato del Cardenal, realizado por Diego Pacheco.

El edificio  preside el Campo de la Compañía. El Cardenal había solicitado al Ayuntamiento la cesión de estos terrenos para crear un espacio abierto que facilitara su visión y resaltara su belleza. El lugar es punto de reunión habitual en Monforte. Antiguamente se leían los edictos o se informaba a la población de los hechos importantes, hoy en día es el escenario principal de los conciertos durante las Fiestas Patronales y decorado de otros actos festivos y lúdicos, entre los que también destaca la Feria Medieval que se celebra en Semana Santa.

La calle Cardenal une Nuestra Señora de la Antigua con la Plaza de España, fue el Cardenal quien mandó abrir esta calle para facilitar el acceso desde el centro de la villa hasta el edificio.

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