El Alcalde informa que la justicia vuelve a darle la razón al Ayuntamiento ante la empresa Alacer Ocio por la rescisión del contrato de gestión y explotación de la piscina municipal de Monforte en 2020

Monforte de Lemos, 12 de febrero de 2024. El Alcalde de Monforte, José Tomé Roca, informa que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, acaba de dictar una nueva sentencia favorable al Ayuntamiento de Monforte frente al recurso de apelación interpuesto por la empresa Alacer Ocio y Deporte S.L., ante la rescisión del contrato de gestión y explotación de la piscina municipal climatizada, de los servicios de cafetería y demás incluidos en la instalación, y de las pistas de tenis municipales de A Pinguela, rescisión que el Ayuntamiento adoptó el 26 de octubre de 2020, “ante las graves perturbaciones del servicio ocasionadas por la gestión empresarial que lleva a cabo el contratista”.

En concreto, la empresa Alacer Ocio y Deporte SL, anterior concesionaria de este servicio, alegaba, para avalar su postura, que ”deben prevalecer las consideraciones del informe pericial que aportó a la primera instancia, del Sr. López Fernández, que entiende en resumen que las faltas de mantenimiento que podía haber, no impedían el correcto funcionamiento de la instalación, habiéndose reparado todo aquello que pudiera afectar al adecuado funcionamiento”.

Ante esta postura, la defensa del Ayuntamiento monfortino adujo “…que por lo que hace a las deficiencias detectadas en el mantenimiento de los servicios incluidos en la instalación, dice que la apelante avala su postura con un único informe pericial, pero obvia el resultado del conjunto de las restantes periciales practicadas, que aprecian que las deficiencias de mantenimiento y conservación no son de escasa entidad sino que son graves, y además, pueden afectar a la seguridad tanto de los usuarios como de los trabajadores de esas dependencias”.

Ante esta decisión del Ayuntamiento de rescindirle el contrato, la empresa había presentado ya otro recurso contencioso-administrativo, que perdió ante el Ayuntamiento monfortino, tal y como se recoge en la sentencia desestimatoria de 20 de junio  de 2023, del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Lugo dictada en el PO 270/20.

El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia ratifica en su sentencia de 5 de febrero de 2024, la decisión del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Lugo, basándose en “varios informes tanto en la vía administrativa como en esta judicial, que consideramos que la Juzgadora ha valorado conforme a la sana crítica (art. 348 de la LEC), sin que en esta valoración se detecte que sus conclusiones sean arbitrarias o irrazonables, bien al contrario, el Juzgado da preferencia al parecer de la Administración Local y reputa las deficiencias como de entidad suficiente como para ser causa de extinción contractual por causa de resolución culpable imputable al contratista”.

Así, la sentencia también resalta las graves deficiencias en el cableado y conexionado de diversos aparatos de las instalaciones, que son deficiencias graves porque “su falta de mantenimiento pone en grave peligro a las personas y usuarios”, así como la ausencia de trabajos de mantenimiento y revisión de las diferentes instalaciones por parte de la empresa adjudicataria.

El Alcalde manifestó su satisfacción porque el “TSXG desestimó el recurso de apelación promovido por Alacer Ocio, y ratifica por tanto la sentencia de 2023 del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo núm. 1 de Lugo, que ya había desestimado el recurso presentado por esta empresa, y que, por lo tanto, vuelve a darnos la razón al Ayuntamiento.”

 

Antecedentes

La adjudicación contrato inicial de la piscina municipal de Monforte se produjo el 31 de marzo del año 2011, y se le adjudicó al Grupo Pazos. Y posteriormente, por problemas que tuvo dicha empresa y que la llevaron a concurso de acreedores, se produjo una cesión del contrato de gestión a la empresa Alacer Ocio, el 10 de junio de 2015.

El Alcalde recuerda que “desde el inicio del contrato, y también desde la cesión, se produjeron diferentes situaciones de una mala gestión de un servicio público municipal en varias direcciones, que afectó tanto a los usuarios como a las relaciones laborales difíciles y precarias en algunos casos, con deudas de salarios, deudas a la Seguridad Social, a la Hacienda e incluso deudas a proveedores”.

De este modo, frente a estos incumplimientos reiterados por parte de la empresa gestora, el 11 de marzo de 2020, la Junta de Gobierno Local acordó hacer efectiva la intervención del servicio, “motivada por las graves perturbaciones generalizadas del servicio ocasionadas por la gestión empresarial que lleva a cabo el contratista”.

Ese mismo día, la Junta de Gobierno Local nombró como interventor de la piscina al Técnico Municipal de Deportes, Óscar Rodríguez Pérez, quien se encargó de la normalización del servicio, pagando deudas y salarios.

Tras la intervención municipal de la piscina se encargó la gestión de la piscina a la empresa pública Tragsa, a través de una de las empresas del Grupo Tragsa, llamada Tragsatec, que se encarga de llevar a cabo asistencias técnicas como la que tiene que ver en este caso con la piscina municipal. Tragsatec se hizo cargo del servicio el 27 de octubre de 2020.